Visita Euskadi el gobernador del estado mexicano de Querétaro al objeto de impulsar la cooperación bilateral
26/01/2007
El gobernador Francisco Garrido, a su llegada este miércoles a Ajuria Enea (foto Jon Bernárdez)
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El lehendakari Juan José Ibarretxe ha recibido en Ajuria Enea al gobernador del estado mexicano de Querétaro, Francisco Garrido Patrón, que se encuentra de visita oficial en Euskadi, entre otras cuestiones al objeto de suscribir un protocolo de intenciones para la firma de un nuevo convenio de cooperación entre el Gobierno de Querétaro y el Gobierno Vasco. Garrido Patrón, acompañado del secretario queretano de Desarrollo Sustentable, Renato L. Otamendi, se ha reunido asimismo con Ana Aguirre, titular del departamento vasco de Industria, Comercio y Turismo, y con representantes del sector aeronaútico y de parques tecnológicos del País Vasco.El gobernador mexicano, que llegó a la capital alavesa el pasado miércoles en medio de una gran nevada, se halla en Euskadi al objeto de fortalecer vínculos con el Gobierno Vasco y apoyar la llegada de inversiones vascas a Querétaro. Francisco Garrido Patrón, a quien acompañaba el secretario queretano de Desarrollo Sustentable, Renato López Otamendi, se reunió asimismo con Ana Aguirre, consejera del departamento vasco de Industria, Comercio y Turismo, para tratar temas relacionados con el sector aeronáutico y parques tecnológicos, en un momento en el que Querétaro se halla estableciendo un corredor aeronáutico.
El gobernador Garrido tuvo también la oportunidad de conversar con Alfonso Martínez Cearra, director general de Bilbao Metrópoli-30, sobre la planificación urbanística de las ciudades y de la visión a largo plazo para su desarrollo. Martínez Cearra explicó al gobernador el proceso de transformación experimentado por la ciudad de Bilbao, que abarca un periodo de 20 años, con cambios sustanciales que, entre otras consecuencias, han logrado revitalizar una ciudad antaño industrial y en decadencia y colocarla en primera línea del mapa turístico internacional en virtud de lo que es conocido por los analistas como 'efecto Bilbao' o 'efecto Guggenheim'.