La Euskal Etxea de Townsville, en Queensland, Australia, participó con stand propio en el Townsville Cultural Fest
30/08/2005
Pintxo-Bar instalado por el Centro Vasco de Townsville, con 'kroketak', 'tortillia', 'txorizua', 'arrosa' y otros platos tradicionales de la dieta euskaldun preparados por los vascos locales (foto archivo NQBC)
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Más de 75.000 personas asistieron durante el fin de semana antepasado en Townsville (Australia) al Townsville Cultural Fest, encuentro festivo que contó por primera vez con participación vasca local, de la mano de la joven Euskal Etxea de esta ciudad de la provincia de Queensland, al norte del país. Además del Club Vasco de Townsville, participaron en el evento sociedades representativas de las diferentes culturas presentes en la ciudad, desde griegos, holandeses, escoceses y franceses, hasta filipinos, hindúes y papúes (gentilicio de los habitantes de Papúa-Nueva Guinea).Francamente, los organizadores no esperaban la concurrencia de más de 75.000 personas que obtuvieron y su portavoz, Favardin Daliri, dio fe de ello. Desde su comienzo hace once años, el encuentro de este año ha sido el más concurrido y el más exitoso, afirmó. Representantes de la Euskal Etxea de Townsville, fundada hace apenas unos meses y presente con stand propio en la Feria, agregaron con humor que el éxito no hay que atribuirlo exclusivamente a su presencia en la Feria. 'Todos hemos contribuido, afirmaron', para añadir, ya más en serio, que 'este evento que Townsville celebra con caracter anual supone un reflejo de la realidad rica y diversa de la localidad, a la que todos aportamos y que todos compartimos'.
El festival, del tipo Global Village, en el que cada 'casa' participante supone un gajo de la naranja o una pieza del puzle global que es el mundo, constituye una ocasión para el mutuo conocimiento y para la interacción entre las asociaciones y culturas participantes, de tal modo que los visitantes y los propios expositores tienen la posibilidad de escuchar músicas de los cinco confines, probar manjares realizados con el cariño de quien desea ofrecer a quienes llegan a su stand la mejor de las recepciones y disfrutar de bailes y costumbres festivas procedentes de las tradiciones más variadas, además de contemplar y en algunos casos adquirir objetos, instrumentos musicales y recuerdos de artesanía realizados en los materiales más insospechados.