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Miami, EEUU. "Su madre, Eneritz, se ofreció a ayudar a la Euskal Etxea, organizando y coordinando una 'musika-ikastola', y este año, mientras revisábamos el programa para el curso, nos dimos cuenta del problema de Joseba Andoni, y comprendimos que ahora le tocaba a la Euskal Etxea ayudar a la familia", cuenta a EuskalKultura.com Boni Guenetxea, miembro del centro vasco y también del comité de la campaña de apoyo "United for Joseba Andoni".

La iniciativa acaba de ser presentada en la web del Centro Vasco, donde se pueden realizar los donativos. "El objetivo es llegar a los 75.000 dólares necesarios, en un plazo de 10 meses. La terapia de recuperación después del proceso puede durar varios años, para recuperar lo perdido en estos 8 años pasados. Es imposible en estos momentos calcular el costo total del procedimiento con exactitud. Si al final del proceso y recuperación de Joseba Andoni, quedara algun fondo en la cuenta, se donaría a una organización sin ánimo de lucro con fines de investigacion médica", aclara Guenetxea.

Accidente en la piscina

La odisea de esta familia bakiotarra comenzó cuando con tan sólo 11 meses Joseba Andoni sufrió un accidente en una piscina. Lo rescataron casi ahogado e inconsciente. No se sabe cuánto tiempo pasó bajo el agua, pero la falta de oxígeno dejó secuelas graves en su cerebro, que han afectado a su desarrollo y hacen que sufra convulsiones ocasionales. A la edad de dos años, sufrió ocho convulsiones seguidas y los médicos dijeron a su madre que no volvería a hablar ni a caminar.

Eneritz no se dió por vencida y llevó a su hijo a hospitales de Alemania y Francia, y finalmente en 2007 se instaló en Miami, donde Joseba comenzó a recibir terapia para ayudarle en su desarrollo. "Joseba es un niño de 8 años con la mentalidad de un niño de 3 años, muy cariñoso, que nunca pierde la sonrisa", cuenta su madre. "Le encanta la música, sobre todo el rock, y sufre diferentes tipos de convulsiones, así como pérdida de memoria. Su hermano Anaitz, que va a cumplir 7 años, es el mejor apoyo para todos y muy maduro para la edad que tiene. Entiende todo lo que pasa y colabora y ayuda a su hermano". 

Terapia con células madre

Al cumplir Joseba los 8 años, el programa terapéutico del Miami Children’s Hospital cesa su patrocinio, por lo que Eneritz comenzó en busca de nuevos tratamientos y halló una terapia con células madre que ofrece un alto porcentaje de éxito y que se está realizando en estos momentos en varios centros médicos en los Estados Unidos.

El elevado costo de este procedimiento no está cubierto por los seguros médicos, por lo que la Euskal Etxea de Miami ha decidido dar un paso adelante y ayudar a esta familia, que a pesar de su díficil situación tuvo tras llegar a Miami la generosidad de contribuir con tiempo y dedicación a la comunidad vasca local. "Aquí estamos mi amatxu, mi hermana, mi sobrino y mis dos niños", cuenta Eneritz. "Nuestra relación con la Euskal Etxea de Miami es buenísima, somos como una familia y estamos dispuestos a levantar el euskaletxea para que nuestra cultura y tradiciones sigan vivas ahí donde estemos", manifestaba Eneritz antes de saber que la entidad vasca emprendería esta campaña para ayudarles.

Pero enterados de su situación, el centro vasco ha decidido que ha llegado la hora de devolver ese apoyo desinteresado y ha decidido volcarse en ayudar a uno de los suyos. 

Si deseas contribuir a la campaña, entre en la web de Euskal Etxea de Miami, aquí.