Nikomedes Iguain Azurza, director de Eusko Kultur Etxea, falleció el pasado domingo en Buenos Aires a los 77 años

Dice el parte médico del Hospital Francés de Buenos Aires que Nikomedes Iguain Azurza falleció en el Pabellón J. P. Passicot a las siete de la tarde del domingo 27 de febrero de 2005 de un paro cardio-respiratorio. Decimos sus amigos, sus discípulos, su familia y su viuda que Niko nos acompaña, tal como él sostenía con humor, 'desde la cuarta dimensión'. Dice su obra que Niko está presente. Irene López de Vicuña firma la necrológica desde Buenos Aires.

Nikomedes Iguain Azurza, Niko, nació en Beasain, Gipuzkoa, el 17 de mayo de 1927. Hijo del músico Pedro J. Iguain y de Natalia Azurza, parte en el año 1952 a la Argentina, donde se reencuentra con sus padres y sus siete hermanos, quienes dos años antes habían arribado al país sudamericano buscando guarecerse del régimen franquista.

A pesar del deseo de su padre de no abandonar la tierra natal hasta tener garantizada la salida de todo el grupo familiar, la historia de Niko hubo de ser diferente. En el año 1948, siendo estudiante universitario y mientras, en tiempo de vacaciones, cumplía con el servicio militar en Valladolid fue sorprendido, junto a otros compañeros de estudio, haciendo propaganda nacionalista vasca, hecho que le costó un juicio ante un tribunal militar. Logró, finalmente, llegar al puerto de Buenos Aires, ciudad donde vivió el resto de su vida.

'Despertar los valores de la tradición vasca'

Desarrolló, desde su llegada a Argentina, una intensa actividad en el seno de la comunidad vasca local, buscando 'despertar la memoria etnoantropológica acerca de los valores milenarios de la tradición vasca' entre los miembros de la diáspora. En el año 1957 participa en la formación del Frente Nacional Vasco. Fue fundador, ideólogo y, hasta su último día, el director de Eusko Kultur Etxea-Casa de la Cultura Vasca 'Eusketxe', proyecto que soñó desde la década del 50, presentó en el año 1962 y pudo finalmente materializar en 1988.

Fue miembro fundador de la Fundación Juan de Garay y de Euskal Anaitasuna de Mercedes, además de impulsor y mentor de jóvenes euskal etxeas, tales como Eusko Etxea de Pilar y Zuhaitzaren Herria de Marcos Paz, en la provincia de Buenos Aires, o Kotoiaren Lurra en la provincia del Chaco, entre otras.

El euskaltzale beasaindarra fue, asimismo, socio del Coro Lagun Onak, profesor de euskera en Euskaltzaleak, miembro de número del Instituto Americano de Estudios Vascos desde el año 1974 y socio del Centro Laurak Bat, institución a la que ingresó en el año 1977 por explícita solicitud de sus directivos.

La decana de las euskal etxeas, presidida por entonces por Luken de Monasterio, lo convoca en el deseo de superar la 'notoria insuficiencia de valores humanos' que padecía la institución. 'En el deseo de atenuar esa situación, y si fuere posible, de superarla, la Comisión Directiva ha resuelto invitar a un grupo de prestigiosas figuras de ascendencia vasca, a que ingresen a la entidad como socios activos. En ese grupo de personas nos hemos permitido incluir su nombre, confiando en que su reconocido amor por lo vasco hará que acceda a formar parte de nuestro Centro', le decían en la carta que, en febrero de 1977, suscribieron las autoridades del Laurak Bat.

Desavenencias con Laurak Bat

Sin embargo Niko Iguain terminó sus días enfrentado con esta euskal etxea, por el conflicto que tras un lustro de desavenencias culminó con el inicio de un juicio de desalojo contra Eusko Kultur Etxea, el proyecto que guió sus últimos años de vida. La tristeza por la falta de reconocimiento de la labor de 'Eusketxe' debilitó aún más su endeble salud aunque su espíritu, incólume, conservó la fortaleza. Su ultima batalla fue preservar su obra, y a la hora de la despedida manifestó a sus allegados su felicidad de saber asegurada su continuidad.

Miles de alumnos pasaron por su aula del Colegio de La Salle de Buenos Aires, donde se jubiló tras décadas de desempeñarse como Profesor de Música, Director del Departamento de Estética y organista, labor con la que continuó hasta hace pocos días, cuando su salud lo obligó a reposar. Fue también organista de la Iglesia de la Piedad y compositor de varias obras musicales.

Como escritor, fue autor de 'Lingüística de la semiografía', 'Microvisiones personales' y numerosos artículos acerca de la estética, música y cultura vasca. Figuras como las de Iparragirre, Don Joxe M. de Barandiaran, Txomin Iakakortexarena, Aita Donosti, Txillida y Oteiza fueron materia de sus escritos.

Músico, compositor, organista, escritor, profesor, maestro, amigo. Niko.

Goian bego.

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