euskalkultura.eus

Arrecifes, Argentina. Euskaldunak Denak Bat de Arrecifes se llenó de música el pasado sábado 2 de agosto —víspera de realizar 'La Vasca' su gran celebración anual de San Ignacio— con la proyección del documental 'Betiko Haizea. El viento eterno', realizado por el actor y docente porteño Mauro Telletxea. El documental, que refleja la vida cotidiana del albokari y lutier vasco José Antonio Martínez Osses, sirvió como preámbulo a un Taller de introducción a la alboka, que convocó a una veintena de personas, entre socios, amigos de la euskal etxea y docentes de la comunidad local. Telletxea, cautivado desde hace más de veinte años por el sonido del antiguo instrumento musical vasco, fue el encargado de guiar a los asistentes en un viaje por la historia y la magia de la alboka.

Tras la proyección, el público participó activamente en el Taller donde, de la mano de Mauro, pudo explorar la historia y evolución del instrumento. Los asistentes tuvieron la oportunidad de manipular diferentes tipos de albokas, desde las más antiguas y tradicionales hasta las más modernas, y observar las diferencias en su construcción, sonido, fitas y boquillas. La sesión práctica incluyó la técnica de la respiración circular, necesaria para tocar el instrumento, un desafío que todos abordaron con gran entusiasmo. Y, finalmente, intentaron hacerla sonar y buscar la afinación correcta.

El propio Mauro Telletxea comenta el taller para EuskalKultura.eus, señalando que "fue divertidísimo". "Todo el mundo probó tocar albokas, probó sacarles un sonido, y ya con el instrumento en la mano, la gente hizo muchas preguntas, y me animo a decir que saldrá de entre ellos algún albokari". El encuentro culminó el domingo con la celebración de San Ignacio, donde los presentes tuvieron el privilegio de escuchar a Mauro tocar la alboka junto a dos talentosos músicos locales: el joven Juan Pablo Bilbao Valiela, integrante de DOA, y el percusionista Christian Rodríguez, del grupo vasco argentino Maral. En el concierto, los músicos brindaron un momento de improvisación que fue profundamente emotivo, y el público lo reconoció con grandes aplausos.