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El joven argentino Xavier Inchausti, promesa del violín a sus 17 años, actuará en Ucrania, Taiwán, Suiza e Italia

25/01/2008

Xavier Inchausti durante un concierto ofrecido en Buenos Aires (foto MOGomez)
Xavier Inchausti durante un concierto ofrecido en Buenos Aires (foto MOGomez)

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Desde que a los 12 años actuara como solista en el Teatro Colón de Buenos Aires con la seguridad de un profesional consagrado, el joven violinista vasco argentino Xavier Inchausti ha ido desarrollando una brillante carrera, camino a convertirse en una de las futuras estrellas de este instrumento. Natural de Bahía Blanca y descendiente de vascos de Bizkaia y Navarra, Xavier afronta un 2008 pleno de retos, que lo llevarán a actuar, entre otros, con la Filarmónica de Kiev, en Ucrania, y la Sinfónica de la Universidad de Taiwán. Entre sus proyectos, el joven músico destaca su ilusión por actuar en Euskal Herria, interpretando a uno de sus compositores favoritos, Pablo Sarasate.
El joven violinista bahiense Xavier Inchausti es una de las figuras emergentes en Argentina de esta sacrificada disciplina, y poco a poco se va labrando una interesante carrera internacional. Apoyado por su maestro Rafael Gintoli, de Buenos Aires, a sus 17 años Xavier es el primer violinista argentino que interpreta íntegramente los 24 Caprichos de Paganini, una obra de gran dificultad, y ya ha llamado la atención de destacados violinistas del mundo.

Uno de ellos fue el maestro israelí Shlomo Mintz, que el año pasado lo seleccionó para realizar un Master Course en Israel, junto a otros 40 jóvenes violinistas de todo el mundo: Japón, Corea, Estados Unidos, Rusia, Alemania y Suiza, entre otros. De entre todos ellos Mintz seleccionó a cinco alumnos para enseñarles en persona; entre ellos estaba este joven vasco argentino, tranquilo y humilde. Acostumbrado desde muy joven a enfrentarse solo ante el público, este año Xavier actuará en Ucrania con la Filarmónica de Kiev el 16 de febrero, interpretando el Concierto Nº 1 de Shostakovich bajo la dirección de Pablo Boggiano. Los siguientes conciertos le llevarán a Taiwan, Suiza e Italia, y además ofrecerá numerosos recitales en Argentina.

'Afrontar el público es algo natural para mí'

Inchausti mostró desde pequeño gusto por el violín --de chico jugaba colocándose la pala de tenis bajo el mentón, asegura su madre-- pero Xavier empezó en la música aprendiendo el piano. 'Sentía que con el piano no podía llegar a expresar ciertas cosas y al final lo cambié por el violín', explica el músico a EuskalKultura.com. 'La verdad es que desde pequeño perseguí a los violinistas', recuerda. Sobre la presión de ofrecer tantos conciertos siendo tan joven, Xavier opina que 'actuar frente al público es una cosa natural para mí, llevo mucho tiempo haciéndolo y estoy acostumbrado'.

[En la imagen superior Xavier Inchausti, de pie, en uno de los últimos conciertos en que ha intervenido como solista]

Sus próximos compromisos serán unos viajes que el joven bahiense deberá afrontar solo. Hasta ahora buena parte de los desplazamientos y estancias en otros países han sido junto a sus padres: César Inchausti, pianista, y Graciela Nora Maizterrena. Xavier guarda un recuerdo especial de dos de esos viajes en los que visitaron las localidades de Arratzu, en Bizkaia, y Etxalar, en Nafarroa, de donde son originarias su familia paterna y materna respectivamente.

Raíces en Euskal Herria

En 1996 la familia viajó a Europa con una gira de la Orquesta Sinfónica de Bahía, y terminados los conciertos se acercaron a Euskal Herria con la intención de conocer los pueblos de sus abuelos. 'Primero nos dirigimos a Gernika y cuando entramos a una taberna a preguntar fue tan grande la emoción que casi no nos salían las palabras, fue un sueño hecho realidad...', comenta César, el padre de Xavier, pianista a su vez. 'Al llegar a Arratzu fuimos al caserío Zubiate, donde había vivido el abuelo Cándido Pastor Inchausti y Elordieta. Nos atendieron muy correctos aunque un poco extrañados; luego a medida que les fuimos contando las anécdotas familiares se brindaron con todo y no nos dejaban ir', recuerda Graciela.

[La familia frente al caserío Zubiate de Arratzu: de izquierda a derecha Jesús, Graciela y César, Aquilina y abajo el propio Xavier]

En Zubiate encontraron a Jesús Otazua Elordieta y su esposa Aquilina y conocieron a sus cuatro hijas, todas casadas y con hijos. 'Ellas se llaman Garaipen, Itxaropen, Zorione y Jaione. Con ellos pasamos unos días inolvidables. Xavier, que en ese tiempo tenía cinco años, iba al monte con Jesús a llevar el alimento a las cabras', cuenta Graciela.

[En la imagen superior Xavier junto a Jesús, al que durante su estancia ayudaba en las tareas del campo]

Estadía en Etxalar

Otra parada de este viaje fue en Etxalar, lugar de origen de la familia materna de Xavier. 'Visitamos el caserío Arrinea, donde vivieron los abuelos de Graciela', cuenta César. 'Actualmente vive allí Paquita Arrechea Sanzberro y su hijo Gorka, que está casado y tiene dos hijos. Con ellos estuvimos conversando sobre las anécdotas familiares'. El encuentro con la familia euskaldun fue muy intenso y ha creado una estrecha relación entre ambas partes.

[Xavier y Graciela durante su visita a Etxalar, origen de la familia de ella]

'Tuvimos una segunda oportunidad de viajar a Europa en el año 1999', retoma el hilo Graciela. 'Volvimos a Gernika y en esa ocasión nos quedamos más tiempo en el caserío. Visitamos varios lugares como Lekeitio, donde pudimos escuchar en la catedral a la Sinfónica de Bilbao y en la catedral de Gernika César ofreció un pequeño concierto de órgano. Para Xavier, Jesús y Aquilina son como sus abuelos. Ellos saben que Xavier tiene que estudiar en Europa y están contentos y deseando volver a verlo. Ya han sacado por internet las notas de él y se sienten muy orgullosos'.

Deseoso de actuar en Euskal Herria

Xavier subraya su interés por seguir formándose --en julio y agosto de este año volverá a participar en el Master Course de Israel--, así como de poder ofrecer alguna actuación en Euskal Herria. Además de la afinidad familiar, Xavier tiene otro vínculo con la cultura vasca en la figura del violinista y compositor navarro Pablo Sarasate. 'Es un compositor que me fascina, sus obras para violín son de un virtuosismo increíble', asegura Xavier.

Quizá este año, durante alguna de sus giras y conciertos en Europa, surga la posibilidad. Mientras tanto, quienes deseen saber de sus conciertos en Argentina, Ucrania, Taiwán, Suiza, Italia o Bosnia (son los lugares ya confirmados), encontrarán información actualizada en la Agenda de EuskalKultura.com.


Enlaces relacionados

Inchausti, exaltación del arte del violín
En el periódico argentino La Nación

Video de Xavier interpretando el Capricho nº 5 de Paganini
En www.Youtube.com

Xavier Inchausti: Una vida a través del violín
En la periódico argentino La Nueva Provincia


Comentarios

  • -

    sos un capooooo!!! :) tkm besos

    vicky, 01/01/2010 21:10

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