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Cañuelas, Argentina. Sobre el mediodía comenzaron a llegar las delegaciones a la ciudad de Cañuelas, en la provincia de Buenos Aires. Sin embargo, el espectáculo no comenzó hasta la puesta del sol, cuando una kalejira recorrió las calles Del Carmen, Lara, San Martín y Libertad hasta llegar a la plaza del pueblo donde sobre el escenario, miembros de la euskal etxea local recrearon una tamborrada. A continuación tuvo lugar el recital del coro de la institución para dejar luego el espacio a la danza.

Abrió la presentación el grupo de Cañuelas con Arcos de flores y luego fueron pasando las diferentes delegaciones, mostrando la destreza en cada uno de sus bailes. Mar del Plata presentó Ezpatadantza y Dagas; Bahía Blanca, Kaxarranka y Kaskarot; Arrecifes, Azkaindarrak; Cañuelas subió por segunda vez a escena para hacer esta vez Arku dantza; La Plata se lució con Akelarre; Ekin Dantzari Taldea de Buenos Aires con Amikuztarrak, Zuberoako Makil Dantza, Tafallako Jota y Kontrapas; Maipú con Eusko Irudiak; Rosario con Makil Dantza; y Acción Vasca, también de Buenos Aires, con Mascarada suletina. Chascomús fue el anteúltimo grupo y presentó Arcos mixtos; cerró el colorido espectáculo el grupo local, con Fandango y Arin-arin.

Forma ya parte del calendario anual de citas vascas

La noche no terminaría allí. Después de cenar y en la sede del Centro se agasajó a los grupos de baile y a otros invitados (algunos llegados desde Laprida, otros de Saladillo y también de Villa María, Córdoba) con una romería en la que se combinaron las danzas vascas con danzas típicas de la Pampa Argentina, ya que un grupo de folclore de la zona, constituido por dos guitarras y un cantante, musicalizó la velada hasta las madrugada.

En 2007, primer año del encuentro, se congregaron unos 70 dantzaris para celebrar este encuentro. Posteriormente la cantidad de participantes fue creciendo y el año pasado se acercaron a Cañuelas alrededor alrededor de un centenar. Este año, en su tercera edición, la cantidad de presentes se duplicó y doscientos jóvenes dijeron sí a la invitación del Denak Bat. Pese a que algunos dantzaris tuvieron que recorrer más de 500 kilómetros para poder reunirse con sus pares de otros centros, la distancia no los amedrentó. Salta a la vista el éxito logrado por la institución organizadora, con lo que no queda sino repetir lo que comentaban a EuskalKultura.com desde difrentes grupos llegados a Cañuelas: que este Encuentro de Dantzaris forma ya parte de lo más granado del calendario anual de la comunidad vasca en Argentina.