euskalkultura.eus

Llegados de Terranova. el alcalde de Plasentia, Wayne Power, y la concejala Noella Collins, estarán en Plentzia (Bizkaia) desde mañana hasta el 17 de octubre para avanzar en el hermanamiento entre la Plentzia vasca (antigua Plasencia de Butron) y la fundada hace casi cinco siglos por balleneros vascos que dejaron allí su impronta. Artículo de Virginia Urieta publicado hoy por el diario El Correo.

Virginia Urieta. Los balleneros vascos que desembarcaron en la costa canadiense hace más de cinco siglos bautizaron con nombres de su tierra aquellas zonas en las que recalaron, donde aún se les recuerda. Pero de las más de 40 localizaciones con denominación vasca, sólo perdura Placentia, ubicada en la península de Avalon, en la provincia canadiense de Terranova y Labrador. Un nombre que el investigador e historiador local Sabino Laucirica, entendido en la materia, ya relacionó con Plentzia –antiguamente, Placentia de Butrón–. La huella de los arrantzales que llegaron a ese puerto en 1540 ha perdurado desde entonces. Los pescadores de ballenas de Placentia llegaron a convertirse en la colonia vasca más importante de América del Norte, aunque sólo queda constancia escrita del oriundo de Plentzia Domingo Ibargaray. En las casas de la localidad –que cuenta también con una bonita playa y una estampa singular– ondean ikurriñas y en algunas lápidas, incluso, los versos se han forjado en euskera.

Todo ese legado será rememorado estos días con la visita de autoridades canadienses que buscan estrechar lazos y consensuar un hermanamiento oficial entre los dos municipios. El alcalde de Plasentia, Wayne Power, y la concejala Noella Collins, estarán en la villa desde mañana hasta el 17 de octubre para llevar a cabo un proyecto «anhelado desde hace muchos años», tal y como reconoce el alcalde, David Crestelo. Ambos enclaves comenzaron a forjar vínculos institucionales en 2011, gracias a las gestiones realizadas por Laucirica.

«El hermanamiento es una deuda histórica entre los dos pueblos, ellos tienen gran aprecio a nuestra cultura, a la marca que dejó la faceta industrial que desarrollamos allí. Estamos contentos y emocionados», confiesa el alcalde. Los representantes municipales han elaborado un programa de actos orientado tanto a amenizar la visita de las autoridades canadienses como a divulgar la historia de los balleneros plentziarras entre vecinos y visitantes. El mismo viernes se darán cita en el Palacio Foral de la Diputación, donde Power y Collins serán recibidos por Ibone Bengoetxea, diputada foral de Administración Pública y Relaciones Institucionales, Leyre Madariaga, directora de Relaciones Exteriores, y Estibaliz Urcelay, técnica de Acción Exterior del Gobierno Vasco.

Por la tarde, a las 18.30 horas, tendrá lugar el recibimiento en el Consistorio plentziarra, que contará con txalaparta y aurresku en la plaza del Astillero, donde se hará entrega de la makila. El acto público sobre el hermanamiento se celebrará a las 18.45 horas en una mesa redonda en la que participarán también el investigador Sabin Laucirica y otros expertos en la materia, con temas a debatir como las relaciones históricas entre los dos pueblos, el interés actual por ambas culturas o el futuro viaje del Ocean Endeavour a tierras canadienses que fueron recorridas por los balleneros vascos. Un recorrido histórico por la villa y visitas a la bodega submarina o a los museos, entre otras, coparán la agenda del fin de semana.