Dimiten los miembros que quedaban en la Comisión de Euskera de la UPNA; denuncian parálisis y falta de respuestas y señalan su disposición a seguir colaborando (en Diario de Noticias)

Jesús Iribarren/Iruña-Pamplona. Los siete miembros de la Comisión del Euskera de la UPNA (Universidad Pública de Navarra) ajenos al equipo rectoral que quedaban después de que dimitieran los representantes estudiantiles, el adjunto al rector Patxi Salaberri y Jon Alonso, presentaron ayer al rector Pedro Burillo una carta en la que le argumentan su dimisión en bloque. Tras una cronología de los pasos dados por su comisión, consideran que ha acabado un "ciclo vital" del que hacen un balance positivo en cuanto al "trabajo, entendimiento y consenso interno", aunque negativo sobre la respuesta del equipo rectoral a la mayoría de sus propuestas, además de la crisis final con la dimisión del adjunto y presidente de la misma, lo que ha acabado sumiendo al órgano en una "paralización total", dicen. Al mismo tiempo de presentar la renuncia, señalan su disposición para trabajar por el euskera en la UPNA siempre que haya una "propuesta clara, explícita y transparente". La dimisión se produce después retrasarla hasta que se garantizara un incremento en la oferta de euskera para el próximo año, (aunque fruto más de "la voluntad de los profesores" que de una planificación real, explican) y tras un encuentro con Pedro Burillo, que les comunicó su intención de nombrar un nuevo adjunto al Euskera.

La decisión final abre un impasse complicado ya que el rector no sólo debería buscar un candidato para ese puesto sino también, por estatutos, recomponer toda la Comisión (resultará complicado que sea tan plural como la desaparecida) además de plantear un panorama que genere confianza en sus posibles miembros. Todo ello sin contar con las reticencias de los sectores más conservadores del campus y del Parlamento (UPN, CDN y PSN no quieren formación universitaria bilingüe), por un lado, y las posturas de otro sector político y de grupos como Ikasle Abertzaleak, que abogan por una UPNA "euskaldun" y que la pasada semana ya dieron "por muerta" la comisión del euskera, por otro.

La carta, escrita en un tono constructivo e informativo, repasa los acontecimientos de los últimos dos años (propuesta de materias para el próximo curso, criterios sobre grupos de euskera, reglamento del uso institucional del euskera...) para concluir con esta renuncia acompañada de una oferta --a la vez-- para seguir colaborando, cuestión que como otras que quiera conocer la comunidad universitaria, explicarán los firmantes que no ocultan su "malestar por tener que tomar esta decisión". Desde el Rectorado habían dado pasos con distinto ritmo como el Documento de Bases y el respaldo en el Consejo a la oferta del próximo curso en primer curso que el rector no ha completado en las titulaciones que faltaban. En cualquier caso, unos y otros dejan como legado el citado incremento de la oferta y un cauce para el hipotético relevo tras una cadena de acontecimientos que han conducido a este final no deseado por ninguna de las partes.

(publicado el 25-05-2005 en Diario de Noticias de Navarra)

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