Este año el Día Internacional de la Diáspora Vasca 2025 se celebra en Markina-Xemein (Bizkaia) en una edición que rinde homenaje a los pelotaris vascos que llevaron el “jai-alai” o cesta punta a canchas de todo el mundo. Entre aquellos jóvenes que continuaron su carrera profesional en América estuvo el eibarrés Agustín Guisasola, cuya trayectoria vital refleja como pocas el cruce entre deporte, emigración y compromiso a su país de acogida.
Manifiesto de pasajeros del buque de vapor Seneca en el que embarcaron desde La Habana, Cuba, Agustín Guisasola y sus compañeros con destino a Miami, Florida, el 7 de enero de 1926 (fuente: Documento via autores).
Nacido en 1906 en Eibar, Gipuzkoa, Guisasola embarcó a los 19 años rumbo a Florida, EEUU como parte del extenso grupo de pelotaris profesionales que inauguraron el 1 de abril de 1926 un segundo frontón en Miami, el Biscayne. Su inauguración fue gratamente recibida por la prensa local como un gran acontecimiento, en el que incluso llegaron a incluir bailes tradicionales vascos protagonizados por los jóvenes puntistas. La primera cancha, el Hialeah, inaugurada en enero de 1925 en la ciudad de Hialeah, en el condado de Miami-Dade, se vio obligada a cerrar, tras su primera temporada, debido al éxito del Biscayne. El Biscayne se había convertido en una referencia cultural y deportiva en Miami.
Apenas unos meses después, en septiembre de 1926, un devastador huracán dejó en ruinas el Biscayne, pero pronto fue reconstruido, reabriendo sus puertas en junio de 1927. Sin embargo, nunca volvió a ser la misma cancha hasta que cambió de propietario [1]. Crónicas de la época destacan a sus jugadores vascos, entre ellos Guisasola, como protagonistas de aquel espectáculo que atrajo a miles de espectadores en el sur de Florida.
Postal del Fronton Biscayne de Miami de la década de 1930 (fuente: Boston Public Library).
Agustín también formó parte de la inauguración de Summer Casino de La Habana en 1928, y en 1930 jugaba en la cancha Habana-Madrid, situada también en la capital de Cuba.
En 1928 Agustín se casó en Nueva York con la francesa Therese Yvonne Savoli, con quien alternó estancias en Estados Unidos y Francia durante la década de 1930. De regreso a Nueva York, jugó, siendo ya un veterano, en el Biscayne, hasta 1940 y luego trabajó en la industria textil. Naturalizado ciudadano estadounidense en 1943, pocos meses después, en octubre, ingresó en el Ejército de Estados Unidos, en plena Segunda Guerra Mundial. Es el primer y único puntista profesional (identificado hasta la fecha) que sirvió con Estados Unidos durante la SGM.
Cuadro de puntistas del Fronton Biscayne, 1940. El número 12 podría ser Agustín Guisasola (fuente: Miami Springs Historical Society and Museum).
Tras la contienda, Agustín y su esposa siguieron residiendo en Nueva York y más tarde en Florida, donde falleció en 1982, a la edad de 76 años.
La historia de Agustín Guisasola es la de un emigrante, profesional de la pelota, que participó en los orígenes de la cesta punta en América y que, llegado el momento, se puso el uniforme para combatir bajo su nueva bandera. Su nombre se suma al de cerca de 2.100 veteranos vascos y vasco estadounidenses de la Segunda Guerra Mundial cuya memoria queremos preservar y honrar.